La versión GT3 —una variante enfocada a un uso mixto de carretera y
competición— del Porsche 911 (modelo 991) tiene 475 caballos de
potencia. El anterior GT3 tenía 40 CV menos.
Tiene cambio automático de doble embrague y tracción en las ruedas
traseras. La principal novedad es que la dirección actúa también sobre
estas ruedas y no solo en las delanteras. Como en otros modelos con este
dispositivo, las ruedas cambian su sentido de giro en función de la
velocidad. Otros elementos que influyen en la respuesta dinámica es el
autoblocante trasero (controlado electrónicamente) y los soportes
dinámicos del motor (que evitan que el momento de inercia del motor al
acelerar y retener afecte a la trayectoria del coche).
La carrocería, hecha de acero y aluminio, es 44 mm más ancha que la del Carrera S,
crecimiento que se da en la zona del eje trasero. La suspensión es
regulable y permite ajustar la geometría —altura, caída y
convergencia—. A diferencia del 911 Carrera, el alerón del GT3 es
fijo.
El nuevo GT3 tiene un motor bóxer
atmosférico de seis cilindros, 3,8 litros, con bloque y culata de
aluminio. Porsche dice que la base de este motor es el del Carrera S
(400 CV) pero que comparten pocas piezas. Entre los cambios cita el
cigüeñal, el sistema de control de las válvulas, las bielas de titanio y
los pistones forjados. Esto permite aumentar la capacidad de giro del
motor hasta 9000 rpm (la potencia máxima la logra a 8250 rpm).
Acelera de 0 a 100 km/h en 3,5 segundos. Es un segundo más rápido que el Carrera S y 0,6 s que el anterior GT3. Un Audi R8 5.2 FSI V10 (525 CV), tarda 3,9 s. La velocidad máxima del GT3 es 325 km/h.
Estará a la venta en España a partir de agosto por 157 857 euros, casi 40 000 más que el Carrera S.
No hay comentarios:
Publicar un comentario